"Resignate amiga y deja que la naturaleza haga lo suyo, ya ves que la madre no quiere alimentarla ya" me dijo despuès de anunciarme que la perrita no vivirìa una semana màs .Siendo la sexta y la excepciòn de una camada de fuertes y saludables cachorros, ya que con siete dìas de nacida aùn arrastraba las patitas traseras con mucho esfuerzo, mismas que mi amiga veterinaria dijo son escenciales para desarrollar otras importantìsimas y vitales funciones como tener movilidad intestinal y defecar, sumado a la lucha por alcanzar una teta de la madre ,asì que era impresindible que caminara y como despuès de un concienzudo anàlisis ,diò esto por imposible (explicandome las razones) sòlo le quedaba el consolarme ,ya que por desgracia era la tercera opiniòn de expertos veterinarios en un dìa.
En realidad no era mi intenciòn quedarme con ninguna crìa pues sentìa mi mundo completo al lado de
mi pareja de Schnauzers,sus padres,pero mi espìritu necio venciò (como siempre) y en cuanto entrè con mi cachorrita en nuestro càlido hogar me puse a la labor de investigar cuanta terapia fìsica habìa para rehabilitar un par de extremidades inferiores atrofiadas y dèbiles a pesar que me dijeron que ni esto podìa salvarla.
Durante la siguiente semana no recuerdo haber dormido màs de catorce horas en total ,ya que entre trabajar,estudiar, la terapia cargarla mientras obligaba a su madre a alimentarla y masajear su intestino para ayudarla a defecar por lo menos tres veces al dìa, cuando me daba cuenta el reloj ya habìa dado una vuelta completa ,pero valìa la pena al ver su enorme mirada llena de confianza y sus lenguetazos de agradecimieto cada vez que movia con mayor determinaciòn las patitas para tratar de incorporarse ,lo cual despertò haciendo un dìa en que casi pierdo la esperanza, y a partir de ahì todo fuè miel sobre hojuelas ,pues terminò
empatada en habilidades con sus hermanitos ,los cuales fueron emigrando a diferentes hogares hasta quedarse sòlo ella con sus padres, recuerdo que tuve oportunidad de darla con varias familias que se enamoraron sòlo con verla ,pero en mi condiciòn de madre protectora siempre tuve miedo que algo malo susediera y se revirtiera la situaciòn , o quiza porque pensaba no le darìan los cuidados necesarios dados sus antecedentes y decidì quedarmela .
El pròximo mes cumple 5 años y corre como una campeona, disfruta mucho las caminatas y lo que antes
era su terror se convirtiò en su pasatiempo favorito, subir y bajar las escaleras, que fuè la ùltima habilidad
que superò a los dos años, y bueno, que podrìa decir? sòlo que ambas resolvimos un problema y eso mantiene nuestra relaciòn como muy especial, me alegro no dejar que ninguno de mis amigos veterinarios "la durmiera" en su momento, me alegro haber confrontado a la naturaleza y ser por supuesto nosotras las que ganamos.Me alegro que Laika este conmigo y con sus padres.
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